La gran ventaja del yoga es que se adapta a ti. No importa la edad, el yoga cuida el cuerpo, lo mima. Pero solo asegurándote siempre, que aplicas correctamente la práctica del yoga a tu situación. Esto significa que tienes que permitir que tu cuerpo te hable, escucharle y lo más importante “hacerle caso”. Te dirá dónde está tu límite y como superarlo, en caso de ser un límite superable. O bien te enseñara a aceptar ese límite si es una lesión irreversible o una enfermedad crónica.
Dependiendo del caso, la práctica del yoga puede revertir total o parcialmente algunas lesiones, y en otras puede aliviar sus síntomas. Enseñándote a convivir con la lesión o la enfermedad. Cuanto antes empieces a practicar yoga de forma continua y constante, tu cuerpo y tu mente estarán mejor preparados para enfrentar las situaciones de la vida, entre ellas la enfermedad y la vejez. El yoga no es una panacea que todo lo cura o soluciona, pero es una gran herramienta para cuidar tanto tu cuerpo, cómo tu mente y tu alma.
La correcta aplicación del yoga evitara que te lesiones en tu práctica, haciéndola segura. Y la aplicación del yoga como terapia, no solo es física, también psíquica. Y energética (nādis y Cākras)
La variedad que hay en el yoga, permite que todos encontremos el tipo de yoga que se ajusta a nuestras necesidades.
Eres joven y te gusta el trabajo intenso, encontraras que la intensidad del yoga no se te quedara pequeña. Y desde luego no tendrás la sensación de (como piensan algunos) que vas a dormir.
Si buscas equilibrar cuerpo y mente con un trabajo moderado a tu necesidad, porque no te estas entrenando para las olimpiadas, ni quieres trabajar en un circo acrobático. Solo necesitas adaptar el yoga a tu momento personal.
Que ya tienes una edad, también el yoga se adapta a ti, con posturas y sus variantes a tu medida.
Si quieres comprobar que esto es así, ponte a practicar yoga.
Si quieres llegar a la vejez en las mejores condiciones empieza a practicar yoga cuanto antes. Tengas, 15, 20, 30,…60, 70 años…
Este video tiene un mensaje muy claro…
¿Cuántos deportistas de elite conoces que puedan seguir haciendo lo que hacían?
¿Cuántos se han lesionado practicando deporte y limitando así su cuerpo con diversas operaciones?
No es que en yoga no te puedas lesionar, es que en yoga no forzamos el límite, dejamos que el límite ceda por sí solo. Sin prisas, sin competir. Ni con otros, ni con uno mismo, ni con la postura que prácticas. Por ello decimos que el yoga no es ni un deporte, ni una gimnasia (aunque algunos se empeñen en aplicarlo competitivamente, donde si habrá un riesgo alto de lesión).
Recuerda el yoga se adapta a ti, a tu cuerpo, a tus circunstancias, a tu situación en este momento. Es practica consiente. Aquí y ahora.
